The Dirty Dozen

The Dirty Dozen
Año: 1967
Director: Robert Aldrich
Calificación: 8

La reciente Inglorious Basterds de Tarantino me dejo con un gusto por ver películas bélicas, en estos días he mirado, Enemy at the Gates, The Pianist y la que ahora nos concierne: The Dirty Dozen.

Sinceramente no conocía a Lee Marvin, solo había escuchado su nombre por ahí, pero desconozco por completo su trayectoria, y que tan popular sea, había visto solo una película de John Cassavetes (Rosemary´s Baby), varias del señor Charles Bronson y muchas de Don Donald Sutherland, de ahí en fuera no conocía a nadie más del reparto, pero fue la sinopsis y el hambre de cine bélico lo que me atrajo a ver esta cinta.

El Mayor Reisman (Lee Marvin), un militar experto en la guerra, un tanto rebelde, pero toda una eminencia en el sabotaje del enemigo, recibe la orden de realizar una misión consistente en asaltar una mansión en la que oficiales del ejército alemán (También llamados Malditos Nazis) tienen instalado un puesto de alto mando, centro vacacional y fuerte de defensa, para ello necesitara formar un equipo, pero tendrá que seleccionar a sus candidatos de entre la escoria del ejercito, unos presos que han sido condenados de 20 a 30 años de prisión, o incluso algunos con penas de muerte, y a los que se les promete, si deciden unirse al grupo, la absolución, lo que ellos no saben es que es prácticamente es una misión suicida y muy pocos regresarán para ganar su libertad.

La película me gustó mucho, me mantuvo entretenido todo el tiempo, viendo como al principio los tipos duros pretendían hacer sufrir al Mayor Reisman negandosé a obedecer las ordenes, pero finalmente este les daba su escarmiento, por ejemplo, en una escena, todos dicen estar hartos de rasurarse con agua fría, mientras los demás oficiales que les resguardan, lo hacen con agua caliente, entonces el Mayor Reisman en vez de ceder, lo soluciona todo quitándoles el agua, incluso para bañarse, por lo que pronto se ganan el mote de The Dirty Dozen ( Docena Sucia), aprendiendo una gran lección: Que con el Mayor Reisman no se juega!.

Pronto el Mayor se va ganando la confianza de todos y pese a que, un oficial de mayor grado intenta sabotearlos ellos salen adelante como un equipo demostrando que son capaces de llevar a cabo la misión final, que me recordó mucho a Inglorius Basterds por cierto. El asalto a la mansión Nazi esta muy bien llevado y lleno de suspenso y como conforme avanza la trama te encariñas con los 12 miembros del equipo, al final no quieres que muera ninguno, bueno quizás uno, lamentablemente el mundo no es color de rosa y la batalla resulta una masacre con bajas para ambos bandos (más para el bando de los malos, si, los malditos nazis). Finalmente me entere que hay unas secuelas hechas para televisión, pero chequeando rápidamente su calificación en IMDB me di cuenta de que no son nada buenas comparadas con esta, que es un genial ejemplo del cine bélico a la antiguita, sin muchas explosiones y excesos, pero si, mucha efectividad.